martes, 28 de julio de 2009

Capítulo #34: You never felt so good.

Las gotas de agua fría recorriendo su cuerpo parecían no inmutarla. No quitaba los ojos de la cajita blanca, su corazón latía fuerte y Mike era lo único postrado en su cabeza.

Sonó la cerradura de la puerta.

- Llegué – habló Carden.

- Voy – salió rápidamente de la ducha anudándose la bata al cuerpo.

- ¿Cómo estás? – la saludó besándola con ternura – tienes cara rara.

- Estoy bien – sonrió – ¿Cómo está Sisky?

- mejor, nada grave, sólo la fractura del brazo y eso serí…

Mike quedó sin habla cuando se encontró con el test de embarazo frente a frente sobre el tocador. Antonia intentó despegar los labios pero la tensión la reprimía cada vez que trataba de pronunciar alguna palabra.

- Estoy embarazada, Mike – se sentó en la cama.

Carden le siguió y se arrodilló frente a ella, sintiendo como un par de lagrimas caían por sus mejillas con decisión. Sus ojos verdes brillaban y no paraban de arrojar lágrimas nuevas al exterior. Tomó las manos de su chica y acercó su cara a la de ella, inundándose ambos en un eterno beso.

- No llores mi amor – le pidió Antonia.

- Es que es… – suspiró – es increíble.

Mike amoldaba sus manos a la barriga de Antonia, observándola con curiosidad.

- Es increíble – agregó nuevamente – tendrás que ir al doctor, tendremos – sonrió.

Antonia le miraba con amor, derramando ternura por los poros.

- Será un Carden – sonrió.

- O una Antonia – repuso él.

Se fundieron en un abrazo y pasaron a la cocina.

- ¿Cuándo fue la última vez que pasó?

- Hace una semana – contestó algo avergonzado Mike.

Ambos rieron.

- Pero… que pasó sin cuidarnos – agregó la chica.

Mike achinó sus ojos, haciendo algo de memoria.

- … Hace – hizo una pausa – después del viaje. Un poco después, como un o dos meses.

- O sea que debo tener como….

- Dos meses – la interrumpió Mike, tomándola por la cintura – que hermoso – sonrió.

- Mañana saco hora al doc.

- Si mañana mismo – la besó.

La mañana transcurrió tranquila pero acrecentando la emoción a medida que pasaba. Carden se sentía completamente raro pero feliz. Esto era algo nuevo para él.

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